EL PRIMER
ERROR
En la pálida luz de la memoria
se ahogó el primer error.
Número equivocado
en el calendario.
Pasa una nube roja entre mis cejas
—apenas un
relámpago fugaz—.
Abro las palabras
y me sellan la boca.
Muy hermoso, Julia, me encanta esa sencillez, muy lúcidos, un abrazo
ResponderEliminarGracias Grego. Ya sé que a ti te gusta la poesía del silencio. Me animas apareciendo de vez en cuando. Un abrazo
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